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Más sensible, más expuesta y menos cuidada. Estos son los tres errores habituales del escote en nuestro país. Te contamos por qué se producen, y qué tratamientos, cuidados y cosméticos pueden solucionarlo.

Lo que los expertos denominan ‘escote español’ (zona del cuello y el escote) se caracteriza por presentar menor firmeza y más arrugas, deshidratación y manchas. Y es que, esta zona es más sensible, está más expuesta a las inclemencias el tiempo (sol, viento, contaminación) y, además, es una de las grandes olvidadas de nuestros cuidados diarios. Vamos por partes.

“La piel de esta zona es mucho más delgada y fina que la del rostro, por eso es más frágil y menos resistente a las agresiones externas, como el sol, una de las primeras causas del envejecimiento de esta zona. Además, tiene menos glándulas sebáceas, menos cantidad de colágeno y elastina, por ser más delgada, y cuenta con una baja cantidad de melanocitos (las células que producen melanina y nos protegen de los rayos solares mediante el moreno). Algo más: sabemos que con la edad disminuye su grosor”, define la cirujano y médico estético Virtudes Ruíz. Estas características hacen que el fotoenvejecimiento (manchas, arrugas y flacidez) en esta zona sea mayor y más prematuro que en el rostro y el resto del cuerpo. Por su parte, Estefanía Nieto, directora técnica de Omorovicza incide en el hecho de que el escote cuenta con menos glándulas de producción de sebo: “lo que implica menos lípidos en el tejido y una mayor tendencia a la deshidratación”. Manchas, arrugas, flacidez, deshidratación… así está el panorama.

Al hecho de tratarse de una piel sensible se suma que el escote está mucho más expuesto que otras zonas. “Somos un país latino con altas temperaturas y muchas horas de sol (una media de 2.500 horas de sol anuales), lo que hace que llevemos el escote más desprotegido y esté muy foto-expuesto”, comenta Raquel González, directora de educación de Perricone MD. Por su parte, la cirujana y médico estético María Vicente no considera que el escote esté más expuesto de lo que lo está el rostro o el dorso de las manos, el problema es que es más frágil, le prestamos menos atención, y sufre los envites de las llamadas ‘arrugas de presión’ (arrugas verticales muy marcadas): “son las que aparecen por dormir abrazándote con las manos o en posición fetal.” La cirujana y médico estético Gema Pérez Sevilla lo explica así: “Por la posición lateral que se adopta al estar acostada, la mama superior se desplaza hacia la inferior y se producen zonas de pliegues y arrugas, que mantenidas a lo largo de ocho horas de sueño, se hacen totalmente manifiestas.” Conclusión: el escote sufre más y envejece antes.

Lo cierto es que es una zona bastante olvidada. De hecho, es habitual que no se hidrate, que no se le apliquen principios activos antiedad y que no se proteja con la protección solar necesaria. “En general, solemos cuidarnos más el rostro, incluso el cuello, y nos olvidamos del escote, siendo esta zona una de las que más envejece con la edad”, apunta la doctora Vicente. Precisamente, por esa la falta de hidratación e insuficiente aplicación de protección solar con SPF 50 “se produce, con el paso de los años, un descolgamiento del tejido y un claro envejecimiento pigmentario”, asegura Bárbara Fernández, directora del Centro Médico Estético Dr. Martínez Quindós en León.

Tensaplus AXT Care (47 €), de Virtud Estética. Crema reafirmante con DMAE, vitamina C, ácido tióctico, glicerol y vitamina E. Mejora la flacidez y suaviza las arrugas.

Cold Plasma+ Neck & Chest SPF25 (91 €), de Perricone MD. Con péptidos fortalecedores, vitaminas B3 y C despigmentante. Reafirma, reduce arrugas y despigmenta.

Firming Neck Cream(118 €), de Omorovicza. Posee enzimas de trufa blanca, ácido leontopódico, ácido halurónico y un complejo mineral. Mejora la hidratación y la firmeza.

Neck and Décolleté Ultimate Lift Treatment + 12 Marine Rescue Elixir (210 €), de Haute Custom Beauty. Crema intensiva con antioxidantes y activos hidratantes + 12 ampollas desintoxicantes y antiedad. Cura intensiva reafirmante.

Smart Clinical Repair™ Sérum Corrector de Arrugas (110 €) de Clinique. Con Laser Focus Complex, retinoides y ácido hialurónico. Repara, renueva y rellena la piel.

Bright Decollete Sheet Mask (12 €) de GlamGlow. Mascarilla para hidratar, rellenar e iluminar.

Crema Tenso-Reafirmante Cuello y Escote (63 €), de Germaine de Capuccini. Contiene un activo cosmético obtenido de la flor de Edelweiss y enriquecido con ácido leontopódico, de inmenso poder antioxidante.

Anti –Skin Slackening Complex (195 €) de Nescens. Cosmecéutico con un complejo antiflacidez que restablece la tensión fisiológica de los tejidos, contribuyendo a recuperar su firmeza y tonicidad.

Endocare Cellage Cuello y Escote (56,40 €), de Cantabria Labs. Con SCA Growth Factor Tenchnology, niacinamida, manteca de karité y aloe vera. Combate la flacidez, el tono desigual y la textura irregular del escote.